Fecha 9 del torneo Clausura y Central Córdoba viaja a Ciudad Evita para visitar en su estadio al Club Social y Deportivo Yupanqui.
Todo parecía estar dado para que El Charrúa continúe con la remontada con la que amagó la fecha pasada al vencer a J.J.Urquiza, ya que El Trapero llegaba en la penúltima posición de la tabla, con 1 victoria y 6 derrotas habiendo recibido en su valla 14 goles, pero Central Córdoba iba a enfrentarse contra su peor rival, es decir… Central Córdoba.
Digo esto porque El Charrúa jugó uno de los peores partidos en mucho tiempo. Hizo todo mal desde el principio, pese a tener jugadores de muy buen pie en el medio campo, Flores, Sierra, Marín y Mustachi no lograba hilvanar una jugada bien elaborada y recurría al pelotazo para Príncipe que desde su regreso de la lesión anda con la pólvora mojada y Vranjican, un centro delantero que ya lleva una docena de partidos jugados y que no ha podido justificar su llegada al club como refuerzo y mucho menos haberle podido darle la razón a quienes decidieron dejar de lado a jugadores jóvenes y prometedores como Piccinini o Fava. Por su parte Yupanqui ingresó con más ganas que fútbol, conocedor de sus limitaciones le puso garra y voluntad a cada pelota mientras que el talento corría por parte del platinado Videla.
Ante un golpe tan duro como el recibido hoy resulta anecdótico pormenorizar en una crónica detallada del partido, así que sólo digamos que el primer tiempo fue enredado y parejo entre uno que quería y no podía, el local y la visita que parecía poder pero no querer. Contabilizamos un par de jugadas con algo de riesgo por ambos lados que fueron bien resueltas por los arqueros Boragno y Colombo que sacó con gran volada un cabezazo que parecía ingresar al arco. Lo mejor del Charrúa se vio en el gol, si bien la jugada comienza con una pifia increíble de un defensor que le permite a Flores tomar la pelota, encarar con toda decisión el área rival y ante la salida del arquero definir con gran categoría para poner el 1-0 con que se cerrará el primer tiempo. Por el desarrollo del encuentro me pareció demasiado premio para un CC que estaba jugando realmente muy mal. Ahora cabría la posibilidad de que los melones se acomodaran solos en el camión, que el Charrúa con la tranquilidad del gol a favor mejorara su andar y resolviera el encuentro, pero una vez más el equipo que juega con la camiseta de Tigre se mostrará incapaz de sostener un resultado a favor.
Este es un tema tan recurrente que algo me palpitaba, algo me decía que lo íbamos a arruinar, al punto tal que le escribí al WhatsApp a mi amigo Eduardo Piedrabuena que se encontraba en cancha lo que ven reflejado en la captura de pantalla que acompaña esta nota.
Y no se demoró mucho en cumplirse mi pálpito, ingresa Jerkovic por un presumiblemente sentido Duré y a los 4 minutos un centro desde la derecha que parecía inofensivo, va a tomarlo sin problemas Colombo, pero la pelota pica, hace un extraño efecto zigzagueante se aleja de las manos del arquero y el atento y pícaro Giménez mete la cabeza entre Boggino y Colombo para establecer el empate. De allí en más el partido vuelve a la misma tónica que el primer tiempo. Al minuto 7 sale sentido Mustachi y de manera incomprensible la Dupla dispone el ingreso de Lalo Pérez, Hay una gran salvada de Colombo ante un remate cruzado de Videla y una pelota que Marín juega para Vranjican y en su mejor aporte el muy experimentado centro delantero toca para el ingreso al área chica de Príncipe que no logra conectar al gol por milímetros.
Pero el CC tenía que complicarse aún más y para eso recurre a otras de sus grandes falencias, las expulsiones innecesarias, a los 27 minutos Boggino, teniendo ya amarilla, comete una fuerte falta que le permite ganar la segunda limonada y la roja. En ese momento pensé que igual se podía ganar, corriéndolo a Lalo de 2 y a Jerkovic de 4 pero la Dupla decide el ingreso de Tell por Flores, tal vez para sostener un empate tan importante. Yupanqui también aporta lo suyo y el recientemente ingresado Velásquez le pone un manotazo en el rostro a Jerkovic, a un metro del leisman y también se va al vestuario. Otra vez estamos en partido como para ganarlo, el árbitro Manuel Girett, uno de los mejores de la categoría sino el mejor, da 5 minutos más, pero ya sin Mustachi ni Flores en cancha no hay posibilidad de generar futbol asociado, además algunos jugadores Charrúas están muy agotados y al Charrúa le quedan 2 cambios, pero nuevamente la Dupla no los utiliza, ya dijimos que parece estar prohibido sacar a Vranjican aunque lleve 20 minutos sin tocar la pelota. Por lo tanto el CC pretende llegar vía el pelotazo pero los marcadores centrales Sánchez y Lazarte rechazan todo y en la última jugada del partido, contra de Yupanqui, centro bajo que pega accidentalmente, pero ahora se cobra, en el brazo a Tell, penal, ejecuta Palavecino, pone el 2-1 y se terminó lo que se daba.
En Central Córdoba todo está mal, tanto del alambrado para afuera cómo del alambrado para adentro, con una CD que ya ni sabemos cómo quedó conformada, con partidos de visitante que ningún dirigente acompaña e incluso llegamos a jugar contra Deportivo Paraguayo sin haber llevado médico, con una Dupla técnica que está perdida que no acierta en los planteos de los partidos, en las estrategias y mucho menos en los cambios, con un equipo que se va pinchando, se nota la caída anímica del plantel.
En la primer rueda Yupanqui nos derrotó en el Gabino Sosa y sentenció la salida de Diego Pavoni, se le dio el ultimátum de que de no ganar en la fecha siguiente contra Berazategui se tenía que ir y se fue pese a conseguir un buen empate como visitante. Hoy parece repetirse la historia en una igualdad de condiciones asombrosas, nos derrotó El Trapero y de no ganarle a Berazategui creo que llegó la hora en que la Dupla dé un paso al costado.
El Agrio - Pablo Adrián Strafaccio |
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