Es el título menos lapidario que encontré para describir esta gran frustración charrúa en su propia casa ocasionada por la derrota ante San Martín de Burzaco en la primera fecha del Campeonato de la C.
No voy a ser lapidario ni terminal porque hay atenuantes y agravantes que trataré de analizar.
Entre los atenuantes están los nervios, tensión, estrés, propios de un debut de campeonato, pero es muy endeble como argumento ya que Central Córdoba sólo produjo el debut desde el inicio de dos jugadores, el arquero Dianda y el delantero Príncipe y ambos cumplieron, los demás jugadores llevan más de una temporada en el charrúa y la mayoría son gente con experiencia en estos menesteres. También podemos agregar que no llegaron las habilitaciones de Ortiz, Senra y Alfonso que supuestamente estarán todas listas para la semana próxima, por lo tanto no tenemos certeza de cual es en estos momentos el once titular que pretende el Chino Vizcarra como DT.
Como agravante voy a mencionar el que me parece el más relevante. La tardanza inexplicable del DT en hacer los cambios. Resultaba evidente que el calor era un condicionante para el desgaste en el segundo tiempo, como la edad de varios jugadores charrúas que ya no están para jugar 90 minutos a todo ritmo. La merma física era notoria en Musso, Bracco, Mustachi, Di Vanni, Pérez, un poco menos palpable resultaba en Killer y Boggino que les sobra paño y calidad para reemplazar el cansancio por ubicación en tiempo y distancia. Sin embargo mientras la dupla técnica de San Martín ya había ingresado dos jugadores frescos en el medio campo a los 15 minutos y a los 23 completó los 5 cambios, Vizcarra hizo el primer cambio a los 25 minutos y el segundo a los 32 y dos más a los 37 guardando el quinto cambio para una ocasión más necesaria. Dentro de los cuatro cambios hay uno del que me es imposible no comentar, se trata del extraño caso del señor Cantarelli, jugador que lleva varios años en la institución, que no tuvieron nunca en cuenta los distintos DT, creo que el primero fue Vaquero como para tener una idea del tiempo transcurrido y que rescató Vizcarra en los últimos partidos del torneo pasado poniéndolo de a ratos y siempre jugó muy mal, incluso sin una ubicación específica en la cancha. Hoy volvió a ingresar, se ve que se pasó de rosca en el precalentamiento porque daba toda la sensación de que ingresó cansado y volvió a… no sé si a esta altura cabe la palabra defraudar. No tengo nada contra el muchacho pero son varios los que me escriben por privado del Facebook preguntándome si tiene algún padrino dentro del club porque no se entiende que siga formando parte del plantel y yo no tengo la respuesta, sólo puedo decir que no me consta y ojalá que en pocas fechas más logre mostrarnos toda su valía futbolística.
También debo mencionar al azar, la suerte, que nos resulta siempre esquiva. Central Córdoba arrancó como terminó el año pasado, entregando la pelota en el medio y siendo punzante y vertical de contra. No es el sistema que me agrada y mucho menos de local, estoy cansado de ver a equipos mediocres que se florean toqueteándonos el balón en el medio campo. Pero si nos ceñimos al partido en sí debemos decir que le estaba dando resultado, porque la gente de Burzaco la tenía pero no hacía peligrar nuestro arco, el balón no le llegaba nunca limpio al grandote Caraballo y la dupla Killer Boggino, se lo comía entre dos pancitos. Así a los 8 minutos tuvimos la primera de riesgo a favor con una llegada al fondo de Toloza centro atrás que no conecta por muy poco Di Vanni, rechaza Pereyra y Musso le pega del borde del área yéndose sobre el travesaño y a los 12 minutos pases cortos en el sector izquierdo combinando Toloza Kahial Mustachi, gran pase de El Gitano al vació, llega Toloza centro atrás, disparo de Príncipe, atajadón del ex Deportivo Italiano Centeno, el rebote le vuelve a caer a Príncipe que la muy fuerte, pega en Centeno y entra, 1 a 0 y parecía que todo sería color de rosa.
A poco de terminar el primer tiempo el Diablo mete la cola, a los 44 se equivoca en el medio campo Kahial, ocasiona un veloz ataque de Fernández, falta fuerte de Boggino para poder pararlo, amarilla para él y tiro libre a las puertas del área bien al medio del arco. Ejecuta Pombo, aquel que jugando para Berazategui nos amargó tantas tardes, trata de darle la comba hacia el palo derecho de Dianda buscando más precisión que fuerza, el arquero va bien pero la pelota rebota en un jugador de la barrera que salta, cambia la trayectoria y se mete en el palo izquierdo tomándolo al guardameta a contra pie y así se van al entretiempo con un empate impensado.
El inicio del segundo tiempo muestra a un Charrúa decidido a buscar el triunfo, a los 2 minutos salva Centeno un cabezazo con destino de red de Príncipe. Pero pasa el tiempo y vamos entrando en el problema de la merma física y falta de reacción desde el banco porque los cambios no se hacen.
Así pasa nuevamente a dominar pelota y terreno San Martín, ya que Musso y Bracco sin aire no recuperan, Lalo no se puede proyectar más y Di Vanni comienza a perder todos los mano a mano, pero los cambios no llegan y el Sanma se vuelve cada vez más peligroso, con su medio campo con nuevos aires, Dianda salva con gran estirada un centro venenoso y parece estar más cerca del triunfo el visitante que el local, hasta que llega una jugada que el Charrúa no sabrá capitalizar, la expulsión de Maidana por roja directa al levantar imprudente su pie a la altura de la cabeza adversaria. A partir de ese momento la gente de Burzaco sólo busca sostener el empate y el CC vuelve a la carga teniendo varias oportunidades para concretar el segundo pero la gran actuación de Centeno y a veces la falta de precisión o determinación, ni Osella ni Killer pudieron concretar dos pelotas que les cayeron a un metro de la línea de gol, más los cambios que a excepción de Barbosa no aportaron nada, hicieron caer en la desesperación a jugadores locales y público.
Para colmo de los colmos, en tiempo suplementario, el Diablo vuelve a meter la cola, a los 49 única contra de los azules de Burzaco, la aguanta bien el ingresado Aquino contra dos defensores charrúas, lo ve venir a la carrera al también ingresado Benítez, se la pasa con justeza y su remate deja sin chance a Dianda para poner el 1-2 llevándose tres puntos del Gabino Sosa que no soñaban ni sus fanáticos más optimistas.
Así chocó la Vizcarreta, dejándonos a todos con demasiadas malas sensaciones, entre ellas ¿si sale Mustachi o no juega un partido, quién generará futbol en el Matador de Tablada?
Ahora a viajar para enfrentar al duro Lamadrid, después en casa recibiremos al recién descendido JJ Urquiza y luego fecha libre, como para ir repensando algunas cositas.
El Agrio - Pablo Adrián Strafaccio
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