Fecha 7 del Clausura y el sol engalana al mítico Gabino Sosa de Rosario para recibir un duelo con mucha historia en la divisional, incluyendo finales que decidieron ascensos, entre el local Central Córdoba y el Deportivo Laferrere. Ambos equipos navegando inciertos en la mitad de la tabla pero con el peso de una historia sobre sus espaldas que los obliga a aspirar a mucho más.
Malvestitti continuó con su esquema de jugar con línea de 4, un solo 5 de local, de visitante lo hace con dos, dos carrileros, dos enganches y un nueve de área. Esquema que decidió llenar con los siguientes apellidos, Giroldi al arco, Komar Osella Killer Ríos, Musso, Kaial abierto por derecha y Tolosa por izquierda, Mustachi Aguirre libres, y de punta Villegas.
Por su parte el DT del Lafe apostó a un 4-4-1-1 con el hábil Roseti de enganche y la potencia de Javier Rossi como punta de lanza.
Comenzó el juego e inmediatamente Laferrere se hizo dueño del balón, pero de una forma tan absoluta que los hinchas charrúas miraban el estadio como para convencerse de que estaban jugando de local. Los mediocampistas rosarinos, por usar un término bien de tablón, ni la olían, por suerte para el CC los albiverdes no profundizaban con certeza y hay que darle mucho mérito a la defensa local que se convirtió en una verdadera muralla, pero Córdoba la rebotaba y no la recuperaba, no daba tres pases seguidos y ninguno de los dos llegaba con peligro.
Afinando el lápiz se puede llegar a mencionar una jugada por bando, a los 25 minutos Kaial pelea un balón en mitad de cancha, el rebote le cae a Aguirre que con esa calidad que viene mostrando desde su llegada al club, puntea justo para el pique al vacio de Villegas como puntero derecho, el 9 gana en velocidad se enfrenta a la salida del arquero Morel, levanta la cabeza, no ve a nadie como para tirar el centro atrás y resuelve con un potente remate que se va cerca del primer palo. Por el lado de Laferrere, se da una jugada parecida a su favor a los 38 minutos, Rosetti que tira en cortada para Rossi, el centrodelantero que ensaya la gambeta larga frente a Giroldi, parecía que el gol era inevitable, pero San Matías se estira y recupera el balón.
Culmina el aburrido primer tiempo y dos equipos que prometían mucho en base a su pasado lejano, jugaron como lo indica su pasado cercano, Lafe llegaba luego de empatar de local y el Charrúa de perder como visitante.
En el entretiempo Malvestitti hace una buena lectura y acierta con un cambio, sale Komar e ingresa Saucedo y no es que el rubio Mateo haya jugado mal, sino que su justificación en cancha no pasa precisamente por su velocidad ni su salida por el lateral sino por tener otro hombre alto para cabecear en las dos áreas, pero ni Laferrere llegaba vía centros ni Central Córdoba poseía la pelota como para buscar faltas que generasen centros a favor y el Monito es un jugador que sí asegura una salida rápida y una trepada peligrosa para el rival. Este pequeño análisis se justificó al minuto de juego cuando sorprende por su la lateral Saucedo en un pique al fondo que no terminó mejor por un inoportuno resbalón, pero confirmaba la idea.
Llega el mágico minuto 2, Ríos, nuevamente de muy buen partido, se adelanta por izquierda levanta la cabeza, ve el pique en diagonal al corazón del área de Villegas, el ex salaito inteligentemente la pica por sobre la posición de los centrales, el 9 que salta pero no cabecea sino que la duerme con el pecho y antes de que toque el suelo saca un remate que deja sin chances a Morel, un golazo de este muchacho que está pasando por un momento extraordinario.
Ahora todos pensamos que con un gol tan tempranero Córdoba encontraría la calma para reordenar sus líneas y defenderse con el balón, pero nada de eso ocurrió, sorprendentemente se volvió al trámite del primer tiempo, campo y pelota para Laferrere y el Charrúa cada minuto que pasaba se posicionaba más cerca de Giroldi.
El Chueco vuelve a hacer una buena lectura y decide los ingresos de Bautista Carrera y Barbosa, que jugó bien como cada vez que se le da la oportunidad de entrar, por los exhaustos Mustachi y Tolosa. Ahora con Carrera y Musso como doble 5 el cerrojo para la visita se hace inexpugnable, más la amenaza de la velocidad de Barbosa acompañando a Villegas. Más tarde ingresará Di Vanni por Aguirre, bajando un poco Barbosa a la posición del 10 y dejando arriba a los dos tanques, por último ingresará Alegre por el también agotado Musso y el CC refresca su energía.
De esta manera Central Córdoba no recupera el balón, pero ahora cada contra parece tener un destino cierto de gol. Merecen destacarse dos entre otras varias que le faltaron una buena decisión final. Al minuto 22 Kaial la tira larga para Villegas, quien llega al fondo, no ve a nadie en el área y decide tocar atrás al ingreso de Saucedo que a la carrera saca un centro cruzado que impacta Barbosa que venía tocando pito por izquierda y su remate se va cerca del palo. Al minuto 38 Saucedo vuelve a trepar por su lateral, la envía en cortada para el pique del incansable Villegas y este de media vuelta saca un disparo cruzado que se va cerca del palo más alejado.
Estampé en el título de esta nota el que el Charrúa había sufrido de más y así fue, no por la peligrosidad de Laferrere, ya que sus intentos eran una y otra vez rechazados por la firmeza de la última zaga rosarina, sino porque el resultado era muy exiguo y Central Córdoba no lograba aprovechar las oportunidades que se le brindaban para hacer el segundo gol y respirar con tranquilidad, así que teniendo en cuenta que la pelota siempre la tenían los muchachos de la Matanza en cualquier momento podría llegar una jugada, una pifia, uno de esos errores raros que los árbitros suelen cometer en nuestra cancha más un juez que dirige como De Oto, ustedes me entienden. Y casi se da, al minuto 48 cae un centro llovido que nadie logra rechazar y Rossi saca de media vuelta un derechazo que se va por sobre el horizontal paralizando todos los corazones rosarinos que seguían el encuentro.
Fin del encuentro, se ganó sin jugar como queremos, se ganó gracias al compromiso de los jugadores con la camiseta, se ganó porque el técnico vió lo que tenía que ver e hizo los cambios que tenían que hacerse, porque cuando el juego no fluye hay que encontrar otras variantes y se encontraron. Del plantel hay que resaltar el momento que atraviesa Villegas, que parece no perdonar, lleva 4 goles en 3 partidos, pero además juega bien se la devuelve redonda a los compañeros y no le escapa al esfuerzo de recuperar el balón. Por mi parte quiero también resaltar el partido que jugó hoy Osella, impasable por arriba y por abajo, llegando a los cruces con exactitud.
Malvestitti tiene un saludable problema en la pareja central de la defensa porque cuando regrese de la lesión Boginno tiene a tres cracks para dos lugares. Por último espero los regresos de Ferrero, González, Gómez y Gaitán que para mí son excelentes jugadores que mucho pueden aportar del medio para arriba.
Hoy no nos gustó el juego del CC pero el triunfo no deja de ser un aliciente importante para el plantel y seguimos esperanzados.
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